Citas online seguras y divertidas

Cada vez más personas tienen acceso a la red, y con ello a los beneficios que esta nos ofrece. Entre ellos destaca el acrecentado uso de las páginas de citas online.

Mucho se ha dicho sobre esta nueva forma de acceder a personas que, de otro modo jamás habrías conocido. Pero la primera gran pregunta es: ¿se pueden conseguir citas online seguras y divertidas?

El internet trajo facilidad a nuestras vidas y evolución al ser humano. Pero como todo en esta vida, su contraparte está en sí mismo.

La cantidad de delitos electrónicos crece cada segundo junto con el número de usuarios nuevos en la red. Es por eso que llega el miedo, más allá de tus prejuicios y te hace preguntarte si te estarás exponiendo demasiado por un poco de placer, si realmente vale la pena.

Por eso hoy traemos algunos consejos básicos de seguridad para que te des la oportunidad de explorar estas páginas, disfrutar más abiertamente de tu sexualidad de apps sin poner tu integridad en riesgo.

Consejos para disfrutar Citas online seguras y divertidas

Primer consejo

No pases de colocar tus gustos a colocar información personal valiosa en tu perfil. La otra persona puede saber si tienen gustos en común sin necesidad de conocer los números de tus cuentas bancarias. Si te sientes más seguro, colocar tu segundo nombre en lugar de tu nombre de pila, puede tranquilizarte un poco. Además, esto puede ahorrarte inconvenientes en caso de que alguna persona no deseada te encuentre en la red.

Segundo consejo

Los lugares de encuentro deben resultar de un acuerdo mutuo. No dejes que la otra persona te imponga determinado lugar. En ocasiones, llevar a un amigo como “vigilante distante” al primer encuentro, puede hacerte sentir mayor seguridad.

Tercer consejo

Escucha a tu instinto. Si algo es demasiado sospechoso o parece demasiado bueno para ser cierto, no te sientas mal por investigar un poco. Asegurarte de que la otra persona sea quien dice no está mal, aceptar verte con él o ella después de solo media hora charlando y en su departamento, no es recomendable.

Cuarto consejo

Cuida lo que compartes. Si en algún punto antes del primer encuentro el chat sube de tono y sientes la tentación de enviar fotos íntimas, al menos cerciórate de no mostrar detalles de tu rostro o contexto. Esto podría colocarte en una posición vulnerable.

Considera lo mismo con los medios de contacto que le otorgas a las personas del chat. Los números de contacto, correos electrónicos, dirección del trabajo o residencia podrían clasificarse como comprometedores en estos casos.

Quinto consejo

Evita a toda costa cuentas sospechosas. En esto incluimos perfiles sin fotografía o descripción, o con fotografías de lo que parece un modelo ruso sacado de una portada de revista. Además, si la conversación sale de lo casual a preguntar por tu salario o ingresos, lugar de residencia o algún dato que implique información delicada o personal, eres libre de abandonar el chat.

Las citas online han acabado con la barrera de los seis grados de separación para traerte personas que encajen entre tus gustos y que no pudiste haber conocido de otro modo. Disfrutar de ellas es tu derecho, pero preservar tu seguridad e integridad es tu deber.

Por eso, sal, diviértete y conoce nuevas personas, explora nuevos horizontes, pero cuida de ti en el trayecto.

Ligar con un compañero de clase. Qué hacer y qué no Argentina

Al encontrarnos en un nuevo entorno en el que percibimos mayor libertad y cargas de estrés a las que no estamos acostumbrados, socializar se convierte en cierto modo, la base de nuestra supervivencia.

A esto, al sumarle el hecho de que nos rodean diariamente las mismas personas, implica la creación de lazos más íntimos que los que acostumbramos formar.

Evidentemente, luego de colocar hormonas y química en la ecuación, el resultado es que sentimos una atracción intensa, quizás meramente sexual a uno u otro compañero de la universidad.

Tener sexo casual con un compañero de clases no es nada del otro mundo. Lo que sí cambia son las reglas del juego, tanto a la hora de la seducción como después del sexo con apps.

Aquí te enseñamos que hacer y que no para dejar fluir esa tensión sexual que existe entre tú y tu compañero/a de la universidad y cómo evitar que acabe en un completo desastre convirtiendo en un drama constante.

Pros y contras de ligar con un compañero de clase

Pros

Ambos pasan la mayor parte de su tiempo en el campus, así que ambos estarán en el mismo entorno casi todo el día en caso de que la tensión sexual se presente de forma repentina.

Podrán experimentar el placer prohibido de tener sexo en las áreas del campus, lo que además de sacarlos de la rutina, añadirá adrenalina a su relación y les permitirá cumplir muchas de esas fantasías universitarias.

El sexting durante clase o las insinuaciones sutiles en público, llenarán de hormonas la sala en que se encuentren. Casi podrán palpar su libido en el aire.

El “lazo” del que hablamos al principio, les dará la oportunidad de experimentar sexo sin tapujos debido al nivel de confianza que desarrollen como compañeros de clase.

Contras

Si se trata de sexo casual de ambas partes no suele aplicar, pero el hecho de que uno de los dos involucre sentimientos en el asunto lo hace sumamente incómodo. Considera esto más aun si no sabes afrontar los encuentros post-sexo casual y el trato indiferente que pudiera darte esa. Además, esta pareja casual puede llegar a hablar más de la cuenta, lo que nos lleva al siguiente contra.

Estarán en boca de todos en cuanto se sepa. Esto no es malo si realmente haces caso omiso de las opiniones ajenas, pero de lo contrario puede incomodarte de forma impresionante.

¿Cómo ligar con un compañero de clase?

Primero, recuerda que las apariencias importan. El aspecto físico importa, aunque traten de negarlo. Así como te repelen las personas de tu clase con apariencia de indigente, así le pasa a los que quieres ligarte.

Utiliza la picardía y las indirectas. Una mirada, un rose o un guiño pueden ayudar más de lo que piensas.

Busca alguna excusa para acercarte. Piensa en las asignaciones de las clases que tienen en común y pregúntale algo al respecto. Conversa con esa persona fuera del aula y deja relucir tu simpatía.

No des nada por sentado. Tener su número no implica necesariamente que tengas algo asegurado con esa persona. Jugar a hacerse el difícil es excelente en este contexto y cualquiera que implique coqueteo.

Lo anterior aplica también en caso de haber conseguido un match con un compañero de clase en alguna aplicación de citas en línea. Del mismo modo, busca conversación, sé amigable y pícaro y no des nada por sentado, nunca. Solo que en estos casos, por encontrarse fuera del ambiente que habitúan, es más fácil soltarse y hablar sin prejuicios, y conseguir que la otra persona se desinhiba contigo.

Que no hacer cuando ligas con un compañero de la universidad

Nunca te metas con personas del mismo círculo social o trata de evitarlo a toda costa. No solo puedes disolver un grupo al que no pertenecías, sino que llegarás a crear drama así hayas buscado solo una noche de sexo en ambas ocasiones.

Lo anterior aplica también para tú grupo social. Alguno de tus compañeros y amigos cercanos puede ayudarte en tu conquista, pero meterte con alguno/a de ellos puede resultar todo un desastre.

No seas invasivo. Recuerda que él o ella ya tenía un espacio personal antes de ti. Buscar conversación o amistad con los fines que sea no implican escribirle cada dos minutos, sentarte a su lado cada clase ni acechar en las zonas comunes del campus. Esto, en lugar de aumentar tus posibilidades las disuelve por completo.

Recuerda también que, a la hora de salir con alguien, es mejor aclarar sus intenciones sin dejar ver demasiado las tuyas para evitar inconvenientes. Más aun si tratas de ligar con un compañero de la universidad al que tendrás que encontrarte a diario indiferentemente de cómo marchen las cosas.

En la universidad no todos buscan sexo sin compromiso y no puedes asumir que esta persona lo haga. Por eso, lanzarte de forma sutil y conocer sus intenciones puede salvarte de ser el abalanzado de la clase y caer en medio de un huracán.

Comportamiento sexual universitario actual vs tradicional en Espana

Así como el comportamiento social, las normas de etiqueta, la tecnología y básicamente todo lo que nos rodea, la sexualidad y el comportamiento sexual de las personas también ha dado un giro drástico en las últimas décadas.

La llegada del internet prometió un cambio en la forma de comunicarse de las personas, y el comportamiento sexual no queda exento de esto.

Hace un par de siglos, las mujeres llegaban vírgenes al matrimonio y se reprochaba a todo aquel que se encontrara fuera de la monogamia.

La forma de encontrar pareja era también muy diferente. Tus padres negociaban tu compañía por emparejarte con una pareja de buena posición tanto económica como social y, aunque la otra persona no cumpliera en absoluto tus expectativas, el contrato había sido cerrado como tarde cuando cumplías los diez años de edad.

El comportamiento sexual universitario y las aplicaciones de citas online

Con el avance tecnológico que representan las aplicaciones de citas online, conseguir sexo casual es más fácil que nunca, sobre todo para la población universitaria en Espana.

Esto es gracias a la libertad que comienzan a experimentar cuando comienzan esta etapa de sus vidas, las modificaciones hormonales que experimentan sus cuerpos y el abanico de actividades sociales que se ofrecen para ellos.

Con esta libertad, los jóvenes tienen la posibilidad de experimentar cuanto deseen. Y dadas las modificaciones culturales que ha transitado nuestra sociedad, estas experiencias parecen promover un matrimonio más tardío y una soltería más abierta.

La apertura de las aplicaciones de citas online parece promover el sexo casual y el emparejamiento adecuado mediante diferentes tipos de algoritmos, pero nuestros jóvenes han creado nuevos usos para ellas.

Las páginas de sexo casual, ¿son utilizadas como tal?

Muchos de ellos acceden a estas aplicaciones por mera curiosidad, sin buscar nada en específico. Y en ocasiones, acaban utilizándola como un medio más para socializar, sin implicar una relación amorosa o sexual en el proceso.

Es decir, si bien los jóvenes parecen tener mayor libertad sexual en la actualidad, las aplicaciones de citas online no son las responsables de ello.

Si bien casi todos han utilizado en algún momento una de estas plataformas, no ha sido necesariamente para conseguir sexo casual. Los motivos son variados. Unos aseguran no necesitar estas plataformas para ligar, otros prefieren coquetear de forma tradicional y siempre está el grupo abierto a todo, tanto de forma presencial como virtual.

Cambios en el comportamiento sexual universitario

No solo las maneras de conseguir sexo han cambiado, sino que los motivos, posibilidades, comportamientos e inclinaciones sexuales se han modificado notoriamente.

En otro siglo, incluso décadas, socialmente hablando, el motivo de la relación sexual no era otro que procrear, se consideraba que un primer coito para el hombre era signo de madures y en las mujeres de impureza.

Incluso la manera de pensar sobre el matrimonio ha cambiado. En otros tiempos, las solteronas sin remedio eran aquellas que alcanzaban los 27 años. El matrimonio normalmente se consumaba antes de los 20 y como dijimos anteriormente, era un negocio intrafamiliar.

Ahora, los jóvenes posponen su matrimonio para darse la libertad de experimentar. Si bien existen los abstinentes que por voluntad propia guardan su virginidad el tiempo que desean, la monogamia ya no se refiere al matrimonio como solía.

Comportamientos sexuales actuales en Espana

Los universitarios practican la monogamia con su pareja sin necesariamente consumar matrimonio, y algunos de ellos simplemente prefieren no comprometerse para seguir experimentando su sexualidad.

El cambio más rotundo en la cultura sexual universitaria puede verse reflejado en la libertad sexual femenina. Estudios realizados en la universidad británica de Columbia, demuestran que, en décadas pasadas, las chicas no eran tan abiertas a experimentar su vida sexual.

Esto no quiere decir que gran número de las mujeres sean ahora abiertas gratis como experimentadoras del sexo casual.

De hecho, tanto en hombres como mujeres vemos que la mayoría de los individuos abiertos a vivir relaciones sexuales casuales, son miembros de determinadas subculturas universitarias, como atletas y miembros de fraternidades o hermandades, en los que, la monogamia o abstinencia pasan a ser un factor social rechazado o inesperado.

En sí, las costumbres sexuales no se han modificado demasiado con el paso del tiempo, y la influencia de las aplicaciones para conseguir sexo casual apenas ha mostrado su influencia en ello.